Entre la suerte y la buena suerte: ¡si quieres, puedes!

Quiero compartir contigo una película; se trata de una historia real que me inspiró hace unos 10 años y está llena de significado. La he visto un sinfín de veces y creo que ese es el truco para conseguir sacarle toda la esencia. Cada vez que la veo descubro sensaciones nuevas lo que me hace apreciar un poco más la diferencia entre Suerte y Buena Suerte.

La primera vez que la ví, me quedé con que “Todo esfuerzo, tiene su recompensa” y debo de reconocer que ha sido con una de las pocas películas que he llorado. A lo largo del filme podemos ver cómo el protagonista es capaz de hacer innumerables cosas por sacar adelante a su hijo, ya que al ocurrirles tantas desgracias llegan a ser desahuciados del piso en el que viven. El objetivo de este padre es simplemente poder vivir tranquilo y feliz, un ansiado propósito que aunque parezca sencillo, siempre se ve alterado por los caprichos del destino.

Hablamos de un claro ejemplo de superación y, sobre todo, un clarísimo ejemplo de que luchando por lo que de verdad quieres, eres capaz de conseguirlo antes o después.

¡Te invito a disfrutarla! A través de los personajes te llegarán momentos de desesperación e impotencia; será una sensación que tendrás presente, sin embargo poco a poco verás que se sale de todo; hablamos de un sentido hacia el camino de la felicidad que te llevará a decirte que si quieres: ¡¡PUEDES!!

Dejo un fragmento que ha sido el que más me ha impactado y recuerdo con frecuencia:

“No permitas que nadie diga que eres incapaz de hacer algo, ni si quiera yo. Si tienes un sueño, debes conservarlo. Si quieres algo, sal a buscarlo, y punto. ¿Sabes?, la gente que no logra conseguir sus sueños suele decirles a los demás que tampoco cumplirán los suyos”.  Y tú, ¿tienes alguna? ¡Compártela con nosotros en nuestras redes, por privado, en el blog de la web…!